La media de precios de la luz del pasado mes de Marzo se situó en 340, 43 euros el MWh, convirtiéndolo en el mes más caro de la historia y triplicando la subida de precios del mismo mes en 2021, que también batió otro record histórico.

Ante esta situación se abre un nuevo panorama que impulsa a la búsqueda de soluciones efectivas para el ahorro económico en las facturas de la luz. Es cuando las alternativas renovables como la energía solar cobran más fuerza que nunca.

¿Por qué sube el precio de la luz?

Lo que llamamos luz, en realidad es electricidad. Es el consumo energético que realiza un hogar, o cualquier tipo de inmueble, para poder mantener el funcionamiento de los diferentes electrodomésticos con los que cuenta y para poder proveer de iluminación artificial.

Esto quiere decir, que todos los inmuebles que tengan lámparas, y otro tipo de electrodomésticos que se enchufen, precisan de una cantidad de energía cada día para funcionar y eso equivale al consumo energético del mes o factura de la luz.

La luz viene subiendo de precios por diferentes motivos, pero principalmente han sido tres los que han propiciado estas subidas tan desproporcionadas.

• El COVID-19
• El precio del petróleo.
• El precio del gas natural.

Si bien la pandemia por COVID-19 es algo que nos ha afectado a todos y se escapa a nuestro control, los otros dos factores son el resultado de una dependencia energética de empresas, que generan la electricidad usando como recursos combustibles fósiles no renovables basados en el carbón.

Si hay menos oferta de esos combustibles, que se usan para generar la electricidad, el precio de los mismos sube y, por lo tanto, el precio de la luz también.

La energía solar como alternativa a la subida de precios de la electricidad

Y aquí es donde entran en juego las energías renovables. Su nombre proviene, precisamente, de la fuente de la que se obtiene la energía. En el caso de las energías renovables, la electricidad se obtiene de fuentes como el sol, el viento o el movimiento del agua.

Estas fuentes son prácticamente inagotables, aunque en muchos casos dependen del clima, pero no dependen del carbón y en el proceso de obtención de electricidad no se generan gases de tipo invernadero.

Por lo tanto, son fuentes doblemente beneficiosas, ya que no dependen de la disponibilidad de recursos del mercado de los combustibles, evitando crisis y subidas de precio descabelladas, ni tampoco contaminan, ayudando a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera.

La energía solar como alternativa renovable para el autoconsumo

En un país como España, donde muchas de sus regiones gozan de una gran cantidad de horas de sol al año, es casi un delito no cuestionarse la instalación de placas solares para abastecer la demanda eléctrica de los hogares. Empresas como placassolaresautoconsumo.org ya forman parte de una iniciativa que anima a los consumidores a plantearse este tipo de instalaciones.

De esta forma, colocando una instalación fotovoltaica en un hogar o una oficina, la energía que consume la casa o el edificio se obtiene directamente del sol, dando lugar a un autoabastecimiento energético que independiza a los inmuebles de la red eléctrica general.

Beneficios de la energía solar

Una instalación fotovoltaica para obtener energía solar tiene muchos beneficios y cada día se comprueba que, en los países que pueden aprovechar la luz solar, es una de las mejores alternativas para ahorrar en las facturas de la luz y, de paso, contribuir a la transición hacia un futuro energéticamente sostenible.

• Rápida amortización de las instalaciones: si bien hacer una instalación de placas solares puede suponer una inversión inicial, esta se amortiza rápidamente. La media dice que en unos seis años, según el tipo de instalación y la región.
• Independencia energética: otro factor formidable es que la energía de tu hogar o de tu oficina no dependerá del abastecimiento de la red eléctrica general que, a su vez, depende del abastecimiento de petróleo o gas. Por lo tanto, tu electricidad estará garantizada, independientemente de las crisis del mercado.
• Ayudas fiscales, reducción de costes y subvenciones: hay todo un plan global enfocado a la transición hacia un sistema energético basado en tecnologías renovables. Por este motivo, hoy en día es mucho más barato hacer una instalación de placas solares que nunca antes. Además, hay ventajas fiscales y subvenciones para incentivar este tipo de instalaciones.
• Inversión de gran rentabilidad: otro dato interesante es que si instalas placas solares en tu casa y en algún momento decides venderla, se revalorizará hasta un 4% más frente a casas que no disponen de este tipo de instalaciones. Lo mismo pasa con las empresas que al obtener su energía de forma renovable, propician la confianza del consumidor en la marca y, por lo tanto, la mayor venta de sus productos.
• Futuro sostenible: y, por último, la energía solar es una fuente energética sostenible. Por esta razón, es importante, ya que la sostenibilidad es la única manera de garantizar nuestro futuro en este planeta favoreciendo un legado digno a las próximas generaciones.

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